Es habitual que los senos pierdan firmeza con el brusco cambio de volumen que se produce en el embarazo y la lactancia. Unos minutos de gimnasia al día pueden ayudarte a prevenir la flacidez.
Manos entrelazadas
Entrelaza las manos con el dorso hacia arriba y los codos completamente estirados. Intenta juntar estos sin doblarlos en ningún momento. Notarás cómo la zona del pectoral se tensa.
Elevación de codos
Con la espalda recta y el cuello relajado, apoya las yemas de los dedos en los hombros. Después, alza los codos lo máximo posible y mantente arriba 5 segundos. Repite el movimiento 10 veces.
Presión con los puños
Flexiona los codos y aprieta con fuerza los puños, a la vez que pones en tensión los brazos y el pecho. Mantén esta presión durante 5 segundos y relaja. Repite 10 veces.
Estiramiento pectoral
Levanta los brazos a la altura de los hombros y estira el pectoral llevando los codos hacia atrás lo máximo posible durante 10 s sin dar rebotes ni tirones.
Juntar los codos
Dobla los codos y elévalos a la altura del pecho. En ese nivel, y manteniendo los puños cerrados, júntalos por delante de ti y vuelve a la posición inicial. Repite 5 veces.
Apretar las palmas
Junta las manos enfrentando las palmas y apretando fuertemente una contra otra. Después descansa el doble de tiempo de lo que hayas contraído, es decir, si aprietas durante 5 segundos, descansa 10. Repite 5 veces.